Pues he leído esta pregunta en un test de una revista y me la he planteado.
Me dan miedo principalmente dos cosas:
- La primera, la muerte. Pero no ella en sí, es decir no me da miedo morirme, sino que el pensar que puedo morirme, que voy a dejar de existir Dios sabe las razones. Cuando pasa esa idea por mi mente me cuesta muchísimo no llorar, este sentimiento causa tristeza y pena en mi alma. A veces pues digo, quizás me muero físicamente pero espiritualmente iré a lo que llaman "El Cielo", pero ¿qué es "El Cielo" Ninguna persona de las que han ido han vuelto, será porque lo pasan tan bien que prefieren no volver, o será porque no les dejan regresar? ¿Existirá ese "Cielo" que explican los cristianos? Y si existe, ¿qué es? ¿Cómo se llega hasta él?
En ocasiones, aunque soy católica, y los católicos no creen en eso, pues creo que después de la muerte vas a algún sitio, pero pasado un tiempo, regresas a la tierra encarnándote en otra persona, nunca volverás a ser como eras, no tendrás el mismo cuerpo, ni la misma familia, ni el mismo pensamiento, pero volverás a vivir que es lo importante. A pesar de todas las dificultades que tiene la vida, me siento realizada con ella, creo que cada una de nuestras vidas tiene un objetivo, y yo poco a poco voy caminando hacia el mío, cosa que me encanta. Por ello, el pensar que voy a volver para seguir haciendo cosas aquí, me mantiene contenta, sin embargo, si pienso que jamás volveré me entristezco.
- La segunda cosa que me dan miedo son las personas, no todas las personas pero sí algunas...
Me aterrorizan aquellos que pues piensan en sí mismos, no miran las consecuencias de sus actos, son egoístas (cuando hablo de egoístas no sólo me refiero a los que no comparten sus cosas sino que a los que pudiendo, incluso teniendo el deber de hacer determinadas cosas, aunque sea quitar un poco de peso a sus compañeros, no las hacen; los que tienen de todo y piden más y más...). También los egocéntricos, los insensibles...
No puedo hablar de todas las características que pueden tener las personas, pero por decirlo de alguna manera, me dan miedo las personas malas de corazón. Aquellas a las que a pesar de que se les dice sus errores y sus faltas no reaccionan, "No dan su brazo a torcer", las que se creen que su opinión es la única que vale y por encima de ellos no existe nadie. De verdad que este tipo de gente no va conmigo, no me llevo mal con nadie, porque creo que el crear mal ambiente no es bueno, pero tampoco me gusta alabarles, ellos en su sitio y yo en el mío, aunque si puedo ayudarles, lo intento.
Nada más, creo que de momento no he encontrado nada, a parte de estas dos cosas, que me asuste...
Un saludo.
