jueves, 18 de septiembre de 2008

La nubecilla.

Había una vez una pequeña nube que estaba muy triste. Su gran deseo era poder regar la tierra, los árboles y las flores. Pero era casi tan pequeña como un pedazo de algodón.

Las nubes grandotas le decían que se apartara de su camino, que ella era una enana y no podía ir a regar los grandes bosques. Ninguna nube quería juntarse con ella porque era demasiado pequeña, así que la nubecilla prosiguió su camino en solitario.

Estaba tan triste que comenzó a llorar; y una de sus lágrimas fue a caer justamente sobre una flor.
Aquella flor era una amapola. Y estaba tan sedienta que miró al cielo llena de gratitud y sonrió a la pequeña nube. Esa sonrisa llenó de orgullo a la nubecilla.

“No importa cuán grande eres, sino lo que eres cuando haces cosas grandes”.


P. D.: No la explico porque creo que sólo la historia se entiende bien, creo que no tengo nada que decir. Si queréis podéis aportar algo. ¡Gracias!

Egoismo

¿Por qué nunca prestamos nuestra ayuda a los demás? ¿Por qué nunca estamos dispuestos a dar sin recibir? ¿Por qué siempre esperamos a que sea el otro el que dé el primer paso y nos pida ayuda el lugar de preguntarle si realmente nos necesita? Por qué, por qué, por qué... Vaya mundo en el que vivimos, que siempre está lleno, no sólo de porques sino también de preguntas. Ojalá encuentre a algún día a alguien que sepa responder a todas estas preguntas, aunque hay quién dice o cree que yo sé las respuestas a mis preguntas, si las supiera... no las escribiría o pondría también la respuesta, ¿no les parece? Me parece totalmente normal, que uno pregunte, porque preguntando se llega a Roma, eso decía mi abuela. Y no me voy a quedar con la duda. Si hay alguien lo suficientemente amable como para contestarme, aunque quizás no sea esa la respuesta, pero sólo con dar su opinión, para mí esa persona gana mucho.
La verdad que a mí me gusta mucho preguntar y es que no puedo evitarlo. Tampoco puedo evitar hablar de las personas egoístas que existen en el mundo y que no soportan que alguien esté mejor que ellos. Que todo lo quieren para sí mismo para su buen vivir. ¿No da más felicidad ayudar a alguien que lo necesita? ¿No te sientes mejor dando algo a esa persona necesitada y viendo lo agradecido que se queda? Pues lamentablemente para muchas personas eso no lo es todo, ellos quieren ser lo principales... Pero en fin, cada uno tiene su forma de vivir y de continuar con su historia.

¡Suerte!
P. D.: Esta entrada es un poco rara pero espero que eso no les impida entender lo que digo y si es así, pues ya sabéis. Me dejáis comentario y lo tendré en cuenta. :D