lunes, 9 de febrero de 2009

Valentía

¿Qué es ser valiente? Ser valiente es arriesgarse. Arriesgarse es hacer algo aún sabiendo que tienes riesgo de perder, pero afortunadamente no siempre perdemos, ya que si siempre perdiéramos nadie arriesgaría y por lo tanto nadie sería valiente. Pero debemos ser positivos y pensar que en un 50% tenemos la posibilidad de ganar algo bueno que nos beneficie y que nos haga sentir bien.
Pero, ¿cómo ser valientes? ¿Es eso algo innato o lo aprendemos con el paso de los años? Pues aunque parezca sencillo no es nada fácil y más aún cuando no has tenido buenas experiencias en tu vida, experiencias que te desmoronan y que a veces te hacen ver el cielo negro cuando realmente es de color azul. Por lo tanto, en mi opinión, la valentía no es algo que tengas desde tu nacimiento sino que los mismos hechos que ocurren a lo largo de tu vida van modificando ese aspecto de tu personalidad.
Siempre he oído decir a mis mayores que el que no arriesga no pierde pero tampoco gana, y con esto vuelvo al tema del principio, es muy importante que tengamos en cuenta esa frase a la hora de actuar, y que no nos sintamos vencidos sin haber puesto “toda la carne en el asador”. Es muy fácil decir “no ha pasado nada”, pero nos avergonzamos en cierto modo porque tampoco hemos ganado, hasta tal punto de que no somos capaces de decir que ha pasado eso porque no hemos luchado por eso que queremos y que nos puede hacer felices.
A lo largo de nuestra vida nos proponemos muchos retos, pero ¿qué sería de esas metas a las que queremos llegar si no tuviéramos valentía? Pensadlo bien porque lamentablemente sería imposible cumplir nuestros más preciados sueños si no tenemos esta característica. Aunque sea difícil, hasta para eso debemos tener valor, para lanzarnos a la piscina, ser optimistas por encima de todo y no dejarnos llevar por las malas experiencias.
Tampoco debemos arriesgarnos si estamos 100% seguros de que no vamos a ganar nada a cambio, ya que eso sería masoquismo. Es muy raro que ocurra pero puede suceder. Si al menos tenemos posibilidades en un 1%, ya es motivo de tirar para adelante y no pensar en lo malo, sino que ser optimistas y pensar que nosotros podemos con eso.
En el caso de que salga mal, tampoco debemos debilitarnos, sino que aprovecharlo como experiencia y aprender tanto de lo bueno para ser mejores personas, como de lo malo para que no nos vuelva a suceder. Todo es posible en esta vida y aunque podamos estar seguros casi al 100%, si no lo estamos en esa cifra, podemos equivocarnos, o pueden torcerse las cosas y no salir como nosotros esperábamos. Incluso en el total convencimiento, aunque los hechos nos demuestren que vamos a salir vencedores, podemos equivocarnos en algo posterior y estropear todo lo que hemos conseguido.
¡Oh, Dios mío! Enséñanos a aprender de las personas más valientes que han pasado por este lugar, gente que lo ha dado todo sin recibir nada a cambio, tales como: Gandhi, Madre Teresa de Calcuta, Martin Luther King… Ellos si que han sido valientes. Aunque nosotros no lleguemos a tener un reconocimiento hasta ese punto, ayúdanos para ser así en el día a día y al menos demostrárselo a los que nos rodean. Saludoos!